Somos Vintage Club, comunidad para entusiastas del vintage, preloved y upcycling

La ropa sostenible vs. de segunda mano. ¿Cuál es más ecofriendly?

Nos ha surgido la duda: ¿ropa sostenible vs. de segunda mano? El por qué no es otro que elegir la opción más sustentable para el planeta. No hay duda en que todos queremos vernos bien sin necesidad de que el medio ambiente tenga un precio a pagar. Es por eso que hemos considerado varias cosas que te darán luz a la cuestión.

Pero antes de nada, creemos que es importante hacer un recordatorio de lo que es ser una marca sostenible. Como agentes de la sociedad y del entorno en el que se desarrollan, las firmas deberían tener la responsabilidad de reducir el impacto que generan en la sociedad.

Es por eso, que una marca está considerara como sostenible cuando asume esa responsabilidad y la lleva a la práctica en sus procesos. Persiguen el cambio, la buena gestión de los recursos y una responsabilidad social en pro del medio ambiente.

La chaqueta más sostenible es la que ya está en tu armario¨.

Lisa Williams, Jefa de Producto de Patagonia

También nos gustaría recalcar la idea de que cualquiera de ambas opciones, ya sea optar por ropa preloved, o de alguna marca ecofriendly, es muchísimo mejor para el planeta que comprar fastfashion.

La ropa sostenible vs. de segunda mano. ¿Cuál es más sostenible?

Para poder posicionarnos ante la duda ropa sostenible vs. de segunda mano, necesitamos información a valorar. Es por eso, que nos parece importante hacer un ‘pros y contras’ de ambas opciones.

Pros y contras de la ropa sostenible

Son muchas – y buenas- las razones para comprar ropa de marcas sostenibles. A continuación, os dejamos las que a nuestro parecer son las más destacadas:

  • Materiales de mejor calidad, lo que garantizan una larga durabilidad de la prenda. Además, esta durabilidad se consolida con los diseños intemporales, muy lejos de las modas fugaces de usar y tirar.

  • Ayudan a preservar los recursos naturales. Por ejemplo, el algodón orgánico utilizado por este tipo de marcas está regado por la lluvia. Esto hace que no haya que utilizar agua extra, pudiendo destinarla a otros cultivos básicos. También el tencel, utilizado en la industria sostenible, es sustituto de prendas fabricadas a base de petróleo, convirtiéndolo en mucho más amable para el medio ambiente.

  • Compromiso con el futuro. Cuando compras una prenda de una marca considerada sostenible, no solo estás comprando la prenda, si no que estás formando parte de la defensa a la protección del planeta. Además, ayudas a la promoción de una industria más inclusiva y respetuosa con el medio.

Pero no todo son buenas noticias. Cuando compramos ropa sostenible, no dejamos de estar comprando ropa nueva producida, por lo que aunque en menor medida, sigue siendo perjudicial para el ecosistema.

Se usan casi 7 litros de agua para hacer un solo par de jeans. Y cada año se utilizan 93 mil millones de metros cúbicos de agua en la industria textil.

Datos de la Fundación Ellen MacArthur

Tampoco existen regulaciones oficiales que hablen sobre los términos sostenibles en el marketing, aunque eso es algo que está cambiando poco a poco. Esa falta de regulación ayuda al greenwashing, una forma que tienen las empresas de aparentar ser más sostenibles de lo que son, utilizando palabras clave, ciertos colores en el branding, y ocultando información.

Como último contra de la moda sostenible, diremos que tiene un precio elevado. Que los procesos sean sostenibles con las personas y el medio ambiente, encarece el producto final, lo que definitivamente provoca que este tipo de industria no sea accesible para todos.

Pros y contras de la ropa de segunda mano

Y es ahora cuando en Somos Vintage hablamos con conocimiento de causa. La ropa de segunda mano y vintage es ropa que ya está producida, en muy buen estado, ¡y lista para ser amada de nuevo! Nosotros, somos expertos en recopilar todas estas prendas para que lleguen a todos vuestros armarios. Es por eso, que podemos decir los pros -que son muchos- y contras -que son muy pocos-. ¡Allá van!

  • Aumenta la vida útil de las prendas. Que ya no utilices una prenda, no significa que otra persona no pueda hacerlo. La ropa vintage tiene, por lo general, un tejido mejor que los utilizados hoy sobre todo en el fastfashion, por lo que a la mayoría, aún le queda mucha marcha que dar. ¿En qué se traduce? En menos prendas en el vertedero.

  • Único y con historia. Al hacerte con una pieza vintage, dotas tu armario de exclusividad, ya que es complicado encontrar otra igual a la tuya.

  • Conservación de los recursos naturales. Una forma importante en que las compras de segunda mano pueden reducir su huella ambiental, es mediante el ahorro de valiosos recursos naturales. El consumo de agua preocupa en materia medioambiental y cada vez más, por lo que comprar ropa de segunda mano, es una buena manera de paliar el daño.

  • Hacerte con prendas de segunda mano significa dejar de lado a las marcas que abusan de los recursos medioambientales. Las mismas que usan materiales de mala calidad para producir prendas de baja calidad sin pensar en su circularidad.

Y a pensar de que la moda vintage y de segunda mano –spoiler– se considera la más sostenible, hay que tener algún contra en la mente.

Cada vez más, las marcas de fastfashion se están subiendo al carro de la ropa preloved. Simplemente, mantened las alertas: ¿acción real o greenwashing con la finalidad de aumentar las ventas y seguir en el consumismo excesivo?

A medida que el ahorro continúa convirtiéndose en una necesidad por la inflación a la que nos sometemos desde 2022, el boom de la segunda mano sigue al alza. Lo que ha provocado que los precios de la ropa de segunda mano se disparen. No ocurre eso en nuestro archivo privado, donde los precios se ajustan al mercado circular 😉.

Foto de Somos Vintage Club

Por otro lado, que las tiendas benéficas cuenten con más presupuesto es sin duda algo bueno, pero hay un inconveniente. La popularidad del ahorro entre los que más recursos tienen, podría causar una reducción de opciones de ropa más barata para quien lo necesita.

Algunas plataformas online se han convertido en centros de compras de segunda mano aburguesadas. Hay revendedores que abusan del círculo, compran en tiendas benéficas y luego revenden productos en plataformas como Depop al triple del precio. Lo peor de todo esto es que lo hacen utilizando la etiqueta ‘vintage‘ en prendas que no lo son para poder aumentar su precio de manera desmesurada.

Las personas que optaban por ropa de segunda mano para ahorrar, se están encontrando con que ahora tampoco pueden permitírselo. Entonces, recurren a las marcas de fastfashion que producen ropa barata que se ajusta a sus presupuestos.

Entonces, moda sostenible vs. de segunda mano. ¿Por cuál decantarse?

Elijas lo que elijas, ya sean prendas de marcas sostenibles o una joyita vintage oculta en el mercadillo local, lo mejor que puedes hacer es tomarlo de una manera consciente y con enfoque en la moda slow. Es decir, considera cada compra. Lo más amable que puede hacer por el medio ambiente es comprar menos, independientemente de la forma en que lo hagas.

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